Cómo viajar a Afganistán durante el dominio talibán

Por Joan Torres 10 Comentarios Actualizado a abril 19, 2024

La primera vez que viajé a Afganistán fue en junio de 2021, justo cuando el ejército de los EE.UU. empezó a retirarse del país, y poco antes de que los talibanes tomaran el poder.

En 2023, con el nuevo cambio de gobierno, decidí volver para ver cómo era viajar a Afganistán bajo el nuevo régimen talibán.

Desde una perspectiva viajera, han cambiado muchísimas cosas en este país.

Después de visitar Afganistán 5 veces, viajando por todo el país, durante todas estaciones del año, desde Kandahar al Corredor de Waján, esta es la guía de viaje a Afganistán más completa, y que contiene todo lo que necesitas saber con respecto a visados, seguridad, permisos, presupuesto y mucho más.

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Claro, por supuesto.

De hecho, Afganistán siempre ha estado abierto al turismo, y siempre se han emitido visados en las embajadas correspondientes.

Sin embargo, con los talibanes solo hay un pequeño grupo de embajadas que pueden expedirte un visado turístico válido – tienes más información en la sección de visados –, pero es un proceso muy sencillo y directo.

Además, ya sea porque quieren lavar su imagen o porque necesitan divisas extranjeras, el nuevo gobierno talibán está recibiendo a los turistas extranjeros con los brazos abiertos, y el único obstáculo son los problemas éticos que pueden experimentar algunos viajeros con un viaje así.

Los más de 40 años de conflicto han convertido Afganistán en un país totalmente arrasado por la guerra, que comenzó en 1979, cuando el pueblo tribal se rebeló contra el partido comunista, dando lugar a una guerra entre la Unión Soviética y los muyahidines, que duró hasta 1989.

Los soviéticos fueron derrotados, pero entonces los señores de la guerra muyahidines comenzaron a luchar entre sí por el poder, haciendo que el país se empobreciera aún más.

Harto de todo el caudillismo y decepcionado por no haberse implantado la ley islámica tras la expulsión de los comunistas, un antiguo muyahidín fundó un movimiento llamado talibán en la ciudad de Kandahar.

Ese hombre era el mulá Omar, el líder histórico de los talibanes.

Los talibanes tomaron rápidamente toda la provincia de Kandahar, y en 1996 ya controlaban el 90% del territorio de Afganistán, incluido Kabul, gobernando hasta 2001.

Luego ocurrió la invasión estadounidense, comenzando una guerra que acabó con su retirada en 2021, un evento que los talibanes aprovecharon para apoderarse del país.

Si viajas en la actualidad a Afganistán, el episodio que vas a presenciar es el de un Afganistán bajo el régimen talibán.

Cuando los talibanes tomaron el poder en 2021, la mayoría de embajadas cancelaron sus servicios de visado, pero con el avance del nuevo Gobierno, cada día son más embajadas en las que puedes solicitar tu visado.

Si tienes pasaporte español o residencia legal en España, podrás solicitar tu visado en la Embajada de Madrid.

La embajada ha cambiado de ubicación, ahora mismo se encuentra en una zona residencial a las afueras de Madrid, en una casa sin letrero que mencione que es una embajada.

La dirección es Río de Adaja 25, 28023 (Madrid).

El número de teléfono de la autoridad respectiva es el (+34) 610493130.

Consejos sobre cómo solicitar el visado de Afganistán en Madrid:

Te aconsejo llamar al embajador. Sin embargo, te en cuenta que es una persona a quien le cuesta mucho coger el teléfono. No pares de insistir.

Si no te coge el teléfono, puedes presentarte en la embajada sin cita. Es lo que yo hice, sobre las 10:00h.

Presentándote en la embajada, el visado lo puedes obtener en el mismo día por un coste de 200€, a pagar en efectivo. El servicio no urgente tarda hasta 10 días y cuesta 100€.

Si no vives en Madrid, o no puedes desplazarte hasta allí, el visado también se puede hacer a través de un mensajero, DHL por ejemplo, pero aquí sí que tendrás que llamarlo y acordar los detalles con él.

Para solicitar el visado, te pedirán:

• 2 fotos tamaño carnet
• fotocopia del pasaporte
• dinero en efectivo
• pasaporte vigente
• Carta de Invitación + Licencia del operador local – opcional

Lo más cómodo es conseguir el visado en Madrid, pero existen otras embajadas que están mucho mejor organizadas, y en donde puedes conseguir el visado a un mejor precio:

• Dubái (Emiratos Árabes Unidos)
• Islamabad (Pakistán)
• Peshawar (Pakistán)
• Doha (Catar)

Los requisitos en dichas embajadas son muy parecidos, y acostumbran a cobrar unos 130$.

En Islamabad, fui a la embajada a las 15:30 y lo recibí al día siguiente sobre las 14:00. Si lo hubiera solicitado por la mañana temprano, podría haberlo recibido el mismo día por la tarde.

En Dubai, te lo dan en un par de horas, al igual que en Peshawar.

Además, varios viajeros afirman que las siguientes embajadas están también dando visados para viajar a Afganistán, aunque desde Against the Compass, no tenemos información al respecto:

• Estambul (Turquía)
• Teherán (Irán)
• Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos)
• Biskek (Kirguistán)

El visado es de entrada única y tiene una validez de 30 días en un periodo de 90 días.

Lee: Cómo viajar a Pakistán

Tanto españoles como todas las nacionalidades latinoamericanas pueden solicitar un visado afgano en cualquiera de las embajadas previamente mencionadas.

Al solicitar tu visado afgano, quizá te pregunten quién será tu sponsor en Afganistán, pero simplemente puedes decir que no necesitas uno, que estás viajando solo/a y que todo irá bien.

Esta regla se aplica en Islamabad y en Madrid, pero a veces, puede que sea un requisito obligatorio en la de Dubái y es que al fin y al cabo, las reglas en Afganistán no están escritas y a menudo éstas dependen del humor de la autoridad respectiva.

Desde el punto de vista de la seguridad, es el mejor momento para visitar Afganistán.

Y te explicaré por qué.

Hasta el verano de 2021, era peligroso viajar por Afganistán.

El país lo gobernaba un gobierno “democrático”, pero en guerra continua con los talibanes, que controlaban una parte importante de Afganistán.

Viajar por las zonas controladas por el gobierno era relativamente seguro, pero ocurrían atentados suicidas día sí y día no, y los delitos con violencia en ciudades como Kabul eran un problema bastante grave.

Por otro lado, era físicamente posible visitar las zonas controladas por los talibanes, pero había muchísimas posibilidades de que te secuestraran.

En resumen, sí que podías visitar Afganistán, pero tenías que viajar con mucho más cuidado y asumir que había un cierto riesgo.

Lee: ¿Es Pakistán seguro?

A pesar de la crisis humanitaria y económica, por fin ha acabado la guerra en Afganistán y los nuevos gobernantes tratan de construir un gobierno pacífico y legítimo – o al menos lo aparentan – con el objetivo de ser reconocidos por toda la comunidad internacional.

Los talibanes ya no realizan atentados terroristas, los secuestros ya son cosa del pasado y los delitos con violencia parecen haberse esfumado de Kabul.

¿Es gracias a los talibanes?

Bueno, eso es lo que quieren que creas, pero en realidad no, es sólo que ahora son ellos los que están en el poder, ya no van a luchar más y solo desean ser un país normal, a la vez que atraen inversión extranjera.

Actualidad. Afganistán es muy seguro en la actualidad, lo llegas a sentir de verdad porque todas las provincias están totalmente abiertas y también porque los afganos que te encuentres por el camino te lo van a repetir todo el rato, que Afganistán ya es seguro por fin.

Quizá te cueste creer que el Estado Islámico siga vivo y que se haya convertido en el enemigo número 1 de los talibanes, afirmando que los talibanes son demasiado blandos y meras marionetas de occidente.

Esta rama del EI en Asia central se denomina EI de Jorasán, y actualmente los talibanes están ejecutando una contrainsurgencia contra ellos.

El EI de Jorasán ha llevado a cabo varios ataques terroristas bajo el régimen talibán, pero todos han sido a pequeña escala y, como he mencionado varias veces, la probabilidad de verse envuelto/a en un atentado suicida es bajísima.

Eso sí, recuerda que esto no es Tailandia, y que viajar por Afganistán nunca está exento de riesgos.

Para viajar por Afganistán, necesitarás un permiso especial de los talibanes.

Si viajas en un tour organizado, no tienes que preocuparte de nada porque tu fixer local se encargará del tema, pero los viajeros independientes tendrán que conseguirlo por su cuenta y, por experiencia propia, no fue muy sencillo.

Por cierto, recuerda que Against the Compass ha organizado varias expediciones para Afganistán para todo el año.

Tu permiso de viaje debe mencionar todas las provincias de Afganistán que vas a visitar.

Sin embargo, solo debe mencionar las provincias en las que tienes pensado alojarte, no las que solo estarás de paso.

Por ejemplo, si quieres visitar Bamiyán desde Kabul, no tendrás más remedio que pasar por la provincia de Vardak, pero no necesitas obligatoriamente un permiso para ello, porque solamente la cruzarás en coche.

Tendrás que pagar 1000 AFN para cada provincia que visites, que son unos 12 USD.

Este permiso es totalmente necesario, y muchos talibanes te lo pedirán en los puestos de control.

Por cierto, te harán pagar 1000 AFN para cada provincia que visites, pero hay viajeros a quienes no les cobran dicho permiso, normalmente a chicas que viajan solas. Cosas de Afganistán.

Advertencia: Los siguientes pasos parecen muy sencillos, pero según nuestra experiencia, las normas cambian constantemente y todo el mundo parecía darnos información diferente. También fue todo un desafío entrar en las distintas oficinas y ministerios, ya que los talibanes que vigilan las puertas no hablan ni una palabra de inglés, y creo que nunca llegaron a entender por qué estábamos allí.

Paso 1 – Ve al Ministerio de Cultura e Información

Esta es la ubicación.

Aquí tendrás que conseguir 2 firmas de 2 autoridades diferentes, te tomará unas 2 horas.

Cuando tengas las 2 firmas, te darán una dirección y un número de teléfono.

Sin embargo, cada una de las 2 autoridades nos dieron 2 direcciones, números de teléfono y personas de contacto completamente diferentes, pero solo una de las personas cogió el teléfono.

Paso 2 – Ve al Directorio de Turismo (Afghan Tour le llaman)

Esta es la ubicación.

Nos costó encontrar este edificio, porque no había ninguna señal, solo muros de hormigón a su alrededor.

Cuando entres al edificio, una persona te entrevistará, y seguramente te pregunte por qué no estás viajando con un guía o un traductor.

Para esta conversación, es importante llevar ropa local, ser súper educado/a y aparentar que te sabes mover bien por el país.

Le dijimos que teníamos amigos cercanos en Bamiyán y Herat, que ellos serían nuestros traductores, y eso le convenció lo suficiente.

También te preguntará qué provincias piensas visitar y, tras la entrevista, hablarás con la máxima autoridad de este departamento, la persona encargada de firmar tu permiso de viaje y darte el visto bueno definitivo.

Buena suerte.

Good luck.

Consejo para viajar a Afganistán: recuerda que las oficinas cierran los viernes.

Una vez consigues tu permiso, tendrás que también registrarte en el Departamento de Cultura e Información regional de cada provincia que visites.

Por ejemplo, si vas Kandahar, lo primero que debes hacer antes de visitar la ciudad es presentarte en la oficina respectiva para conseguir el permiso local, el cual te darán únicamente si primero los muestras el permiso general de Kabul.

Este permiso local te permitirá moverte libremente por la ciudad y la provincia.

¿Dónde se encuentras estas oficinas?

• En Herat está aquí
• En Kandahar está aquí
• En Bamián está aquí
• En Mazar está aquí

Hay talibanes por todas partes y, como viajero/a independiente, tendrás que interactuar con ellos en los puestos de control o cuando trates de conseguir tus permisos.

Esto es lo que debes saber.

Lo creas o no, la mayoría de talibanes con los que hablé fueron súper amables y serviciales.

Principalmente son pastunes, un grupo de personas que viven por todo Pakistán y Afganistán, conocidos por ser el pueblo más hospitalario de la Tierra, regido por un código de conducta que dicta que deben proteger a los huéspedes con su propia vida, si fuera necesario.

Personalmente creo que, la mayoría de veces, su amabilidad es genuina, pero también tienes que recordar que los talibanes desean ser reconocidos como un gobierno legítimo y que su amabilidad desmedida podría formar parte de esa estrategia.

Los talibanes suelen estar muy abiertos a que los fotografíes o te hagas fotos con ellos, y parece que lo disfrutan mucho, así que no seas tímido/a y pídeselo.

Mira, yo no siento especial simpatía por los talibanes.

Al fin y al cabo, todos sabemos que su objetivo es imponer y obligar a todos los afganos a que sigan sus ideas ortodoxas del Islam.

Pero si quieres viajar por el país de forma independiente, vas a tener que seguirles el rollo y, si no estás dispuesto/a a hacerlo, quizá debas viajar por Afganistán con un guía local, para que tus interacciones con ellos sean mínimas.

Me encuentro en un punto en el que no me importa demasiado que me juzguen otros viajeros – o las personas que leen este blog –, así que os diré que en Kabul compré una bandera talibán, que mostré y ondeé en los puestos de control cuando lo vi conveniente, solo para que nuestro viaje fuera tranquilo.

Es importante recordar que Afganistán es el país más conservador del mundo (junto con Yemen) y, nos guste o no, muchos afganos – y también muchas mujeres incluidas – no han visto que hayan cambiado sus vidas con el nuevo gobierno talibán, y la razón es que antes ya seguían esas normas.

Esta es la razón por la que los talibanes cuentan con el apoyo de un sector enorme de la población total.

Es más, hay otro segmento significativo de afganos que, aunque no tienen por qué estar de acuerdo con los planes de los talibanes, los aceptan porque han traído estabilidad y seguridad a todo el país.

Sin embargo, ten en cuenta que no todo el mundo los apoya, sobre todo los hazara – una minoría chiita –, y hay muchos afganos que, aunque siguen siendo conservadores, no están satisfechos con sus ideas extremistas, como prohibir a las mujeres la educación superior, por ejemplo.

¿Cómo está la situación si una mujer viaja por Afganistán?

Si viajas con un hombre, no deberías de tener problemas, pero las mujeres que viajen solas, desde luego que van a experimentarlo de forma distinta.

Mi amiga y viajera Emma Witters ha viajado en solitario y a fondo por Afganistán, incluyendo provincias como Helmand.

Puedes contactar con ella en @emmawitters_

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Las aerolíneas internacionales que volaban a Kabul, como Turkish Airlines o Fly Emirates, han dejado de operar en Afganistán.

En cambio, la compañía aérea Kam Air, que está dirigida por afganos, es la que puede llevarte a Afganistán. También Fly Dubai.

Kam Air cuenta con vuelos diarios desde Dubái e Islamabad, pero también desde Tashkent, Estambul, Abu Dhabi y Doha.

Fly Dubai sale desde la terminal 2 de DXB.

Afganistán comparte frontera con:

Pakistán: El paso Khyber en Torkham está abierto por fin, pero esta es la frontera más caótica que he cruzado en mi vida.

Irán: Está operativa al 100%. Puedes acceder a Herat desde la ciudad iraní de Mashhad. Muchos viajeros han utilizado esta frontera en el pasado.

Turkmenistán: La frontera está abierta siempre que tengas visados válidos, pero ciertamente es territorio inexplorado. Contacté con un fixer turcomano que me dijo que los visados turcomanos se suelen denegar si tu idea es entrar o salir de Turkmenistán, pero hay posibilidades de conseguirlo.

Uzbekistán: Puedes acceder a Afganistán desde la ciudad de Termez. Mazar-e Sarif es la gran ciudad más cercana. Aquí tienes un informe sobre el paso fronterizo.

China: Muy adentrado en el corredor de Waján, a 4.923 metros sobre el nivel del mar, el puerto de Wakhjir conecta Afganistán con China. La frontera está cerrada para extranjeros y, en cualquier caso, está muy retirada como para entrar por ahí.

Tayikistán: Hay varios pasos fronterizos que pueden cruzar los extranjeros, el más popular solía ser el de Ishkashim, pero ahora está cerrado. Shir Khan, cerca de Kunduz, es el que ahora mismo está abierto, ideal si tu intención es ir al valle de Waján.

¿Se permite el viaje independiente en Afganistán?

Sí, está permitido siempre y cuando tengas un permiso de viaje válido. Consulta la sección de permisos de esta publicación.

¿Es difícil viajar de mochilero por Afganistán?

Bueno, eso depende de tu experiencia previa como mochilero y de adónde te dirijas dentro de Afganistán, pero si te soy sincero, no me pareció más difícil que viajar de mochilero por Pakistán.

Si tienes pensado visitar Mazar, Kabul o Bamiyán, no te resultará muy difícil. Hay muchos transportes locales o puedes coger un vuelo nacional fácilmente.

Sin embargo, te recomiendo que guardes el nombre y la ubicación de tu hotel porque, por motivos de seguridad, algunos hoteles de Afganistán no tienen carteles, así que puede que no los encuentres tan fácilmente.

Visitar zonas rurales, la provincia de Kandahar o viajar más allá de Bamiyán en la provincia de Ghor, ya es otra historia. Nadie habla inglés, los hoteles escasean (o no hay directamente) y hay poco transporte público.

Nosotros viajamos en transporte público de Kabul a Herat atravesando el Hindú Kush. Fue complicado, pero la aventura mereció la pena. Consulta el informe de viaje.

¿Deseas unirte a un tour por Afganistán?

Claro, sin problema.

En Against the Compass, cada año organizamos varios tours:

• 15 al 24 de mayo, 2024. PLAZAS AGOTADAS
• 18 de agosto al 2 de septiembre, 2024. PLAZAS AGOTADAS
• 5 al 14 de septiembre, 2024. MÁS INFO
• 3 al 12 de octubre, 2024 (en español). MÁS INFO
• 15 al 24 de octubre, 2024. MÁS INFO

Nuestros tours por Afganistán se agotan súper rápido, por lo que tienes que reservarlos con antelación.

Habiendo diferentes zonas geográficas, Afganistán puede ser un destino para todo el año.

Viajar por Afganistán según cada estación:

En invierno, muchas zonas de Afganistán quedan cubiertas de nieve, alcanzándose temperaturas de -20ºC en lugares como Bamiyán o Waján.

Yo creo que esta es la época más bonita para visitar Afganistán.

Sin embargo, recuerda que en invierno, a menudo surgen problemas del tipo cancelaciones de vuelos domésticos y carreteras bloqueadas, hay que estar preparado para todo.

En Against the Compass organizamos una expedición en invierno, y la verdad que fue un éxito tremendo. Aquí puedes ver nuestra expedición a Afganistán en invierno.

Desde el punto de vista turístico, primavera y otoño son las mejores estaciones para visitar Afganistán, cuando hace un clima agradable en todo el país.

Aun así, quizá sea muy pronto para hacer trekking por el corredor de Waján.

A finales de primavera o principios de otoño, puede que ya haga bastante calor en Mazar o Kandahar. De hecho, las visité en mayo y la temperatura ya rozaba los 40ºC.

En verano, ciudades como Herat, Mazar y Kandahar son auténticos hornos infernales, con temperaturas que superan los 40ºC de media.

En Kabul también hace calor, pero como está a gran altura, es soportable para algunas personas.

No obstante, el verano es la mejor estación para hacer trekking por el corredor de Waján.

Algunas de las mejores cosas que puedes hacer en Afganistán son:

El casco antiguo de Kabul es uno de esos lugares donde siempre hay algo que contemplar.

Es caótica, animada, bulliciosa y sus distintos bazares se componen de callejuelas laberínticas perfectas para deambular sin rumbo.

El mercado de aves quizá sea el lugar más aclamado entre los viajeros.

Pocos lugares de Afganistán transmiten una sensación tan pacífica como Bamiyán, una región montañosa y remota del centro de Afganistán, que contiene un enorme patrimonio budista ancestral y algunas de las montañas más épicas e inmaculadas del país.

Si te gusta la naturaleza, no hay nada mejor en el mundo que Bamiyán.

Kandahar es la antigua capital talibán, donde se inició el movimiento talibán y también la ciudad natal del mulá Omar.

También es el núcleo de los pastunes, un mundo aparte del resto de Afganistán.

Esta es una de las mezquitas más grandiosamente hermosas que he visto en mi vida y que se remonta al siglo XV, un motivo más que suficiente para hacer todo el viaje hasta Mazar.

El medio rural de Afganistán nos ofrece algunas de las zonas más intactas y auténticas del mundo, regiones que apenas se han expuesto al mundo exterior, y el hogar de valles hipnotizantes y frondosos, salpicados de aldeas de adobe y peculiares lugareños.

En Afganistán, su moneda se llama afgani (AFN) y aproximadamente:

1 $ = 80 AFN

¿Afganis o afganos?
Algunas personas cometen un error gracioso (yo también en el pasado), que es el de llamar afgani a la gente de Afganistán. Está mal dicho. El afgani es su moneda y sus habitantes son los afganos.

Yo siempre hago los cambios en uno de los muchos puestos de Shahr-e Naw, en Kabul.

Aceptan euros y dólares. Hasta aceptan rupias pakistaníes, por si te quedan algunas de tu viaje a Pakistán.

Sorprendentemente, los cajeros en Afganistán siguen funcionando incluso bajo el dominio talibán.

Busca el Afghan International Bank. Hay unos cuantos en Kabul, sobretodo en la zona de Shahr-e Naw.

Sí que puedes sacar dinero de un cajero automático, pero no puedes pagar con tarjeta en ningún sitio de Afganistán, por lo que llévate dinero en efectivo para el viaje.

Vivir en Afganistán sale barato, pero los vuelos nacionales y los alojamientos hacen que aumente el coste.

Aquí tienes un resumen de los costes más habituales.

• Desayuno en un restaurante local (suele componerse de huevos, pan y té) – 100 AFS
• Comida local en un restaurante (suele ser arroz pulao, kebab, etc.) – 200-300 AFS
• Comida en un restaurante de gama media – 400-600 AFS

• Vuelo nacional de ida – 60-120 USD
• Taxi dentro de ciudad – 50 AFN para trayectos cortos. Hasta 200-250 AFN para trayectos más largos.
• Taxi para medio día por Kabul – Una vez contraté a un conductor de Kabul por la mañana para llevarme a un montón de sitios distintos que tenía en mente. Me cobró 20 USD.
• Taxi del aeropuerto al centro de la ciudad – 500 AFN en Kabul, 300-400 AFN en Herat o Mazar.
• Taxi de ida a Bamiyán – 75 USD
• Taxi de ida y vuelta a Panshir – 50 USD
• Bus local dentro de la ciudad – 5 AFN

Así está la cosa:

Un buen alojamiento decente se puede ser algo caro.

Lo normal es que pagues entre 30 USD y 50 USD por una habitación, una relativamente básica, pero limpia y con seguridad.

Seguro que vas a encontrar hoteles más baratos, pero no tendrán ningún tipo de seguridad.

Afganistán posee una buena red de autobuses, minibuses y taxis locales compartidos que conectan pueblos y ciudades.

Los mochileros que tengan experiencia y vayan con presupuesto limitado no van a tener problemas para moverse por el país.

Lee: Viajar por tierra desde Kabul hasta Herat por el Minarete de Jam

También es buena opción coger un vuelo nacional para viajar por Afganistán.

Puedes reservar tus billetes online en Kam Air.

También hay otra aerolínea local llamada Ariana. Esta es la que cogemos para volar de Kandahar a Kabul.

Ten en cuenta que las aerolíneas de Afganistán no son muy fiables, y es que los vuelos se retrasan a menudo.

Por cierto, todos los vuelos nacionales pasan por Kabul, no hay vuelo directo de Herat a Mazar, por ejemplo, o de Herat a Kandahar, sino que tienes que pasar forzosamente por Kabul.

Normalmente, todos los vuelos cuestan 60 $ – 120 $, y si ya te encuentras en Afganistán, te recomiendo muchísimo que lo reserves en una oficina física de Kam Air.

Una vez me ocurrió que tras reservar un vuelo con Kam Air por Internet, la reserva no llegó a realizarse, pero sí que me lo cobraron con mi tarjeta. Al final tuve que ir a una oficina física para solucionarlo.

Seguridad del aeropuerto
El nivel de seguridad de todos los aeropuertos de Afganistán es una cosa de locos, consta de varias capas de seguridad con cacheos corporales y escáneres de bolsos. Por eso se recomienda estar en el aeropuerto al menos dos horas antes de tu hora de salida.

Algo que es interesante mencionar es que después de que los talibanes tomaran el control, el país cambió oficialmente su nombre de República Islámica de Afganistán a Emirato Islámico de Afganistán.

También eliminaron la bandera oficial – la que tiene franjas negras, verdes y rojas – y la sustituyeron por la bandera blanca afín a los talibanes, y hoy es visible en todas partes.

Afganistán está compuesto de varias etnias, como los pastunes (42%), los tayikos (27%) y los hazara (9%).

Los hazara son la minoría chiita que tiene rasgos mongoles, y Bamiyán es su corazón.

También hay una importante población de uzbekos, sobre todo en Mazar-e Sarif.

El darí es una variante del persa, la lengua hablada en Irán.

Los afganos e iraníes se pueden entender sin ningún problema.

El darí es la lengua utilizada por la administración y la habla casi el 80% de la población.

El pastún también es una lengua oficial, pero solo lo suelen hablar los pastunes, que son la etnia dominante.

Cuando viajaba por las zonas rurales de Afganistán a través del Hindú Kush, me resultaba muy difícil comunicarme con la gente, no solo por la barrera idiomática, es que ni siquiera servía el lenguaje de signos, seguramente porque se han expuesto tan poco a occidente que su forma de comunicarse es totalmente diferente.

Afganistán es el país más patriarcal del mundo, con y sin los talibanes, pero desde que estos gobiernan, las mujeres han perdido más libertad aún.

No es obligatorio que las mujeres lleven burka, pueden llevar hiyab y pueden caminar solas por las calles, pero los talibanes les han prohibido acceder a estudios superiores.

De hecho, estuve hablando de este tema con un simpatizante talibán y me dijo que, según el profeta Mahoma, las escuelas deben estar divididas por sexos, así que ahora mismo no hay espacio para las mujeres, pero el nuevo gobierno está haciendo todo lo posible por solucionarlo.

Lo que me pareció totalmente increíble es que de verdad se tragara toda esa mierda.

Situada en el corazón de Asia central, la cocina afgana es una mezcla de sabores de Irán, Afganistán, Uzbekistán y Tayikistán.

Se basa tanto en la carne que hasta puede que los vegetarianos tengan problemas si se aventuran en zonas más rurales.

Su plato nacional es el kabuli pulao, y consiste en arroz frito en grasa de carne, normalmente cubierto de zanahorias y pasas, y básicamente es igual que el plov de Uzbekistán.

Afganistán también tiene sus propias albóndigas, llamadas mantu, y suelen estar rellenas de cordero y cubiertas de yogur y lentejas amarillas.

El ashak es el único plato vegetariano de la cocina afgana, y se basa en albóndigas rellenas de puerros y otras verduras.

Afganistán es un país seco, incluso antes de los talibanes.

En las grandes ciudades hay un Wi-Fi un poco inestable, pero si lo necesitas para trabajar, no va a ser lo suficientemente bueno.

Para comprar una SIM, tendrás que ir a una de las sucursales oficiales, que suelen abrir de 8:00 a 16:00.

Hay muchas compañías móviles en Afganistán, incluidas: Afghan Telecom, Afghan Wireless, Etisalat, MTN, Roshan y Salaam.

Al parecer, cada compañía solo da buenos resultados para determinadas provincias, pero cada uno nos decía una cosa distinta.

Al final, compré la de MTN porque me dijeron que era la mejor para todo Afganistán, pero solo me funcionó en las grandes ciudades principales.

Ten en cuenta que no hay 4G, solo 3G o ni eso.

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