Cómo viajar a Haití (2024)

Por Joan Torres 7 Comentarios Actualizado a abril 24, 2024

Viajé por Haití de manera independiente durante 10 días, viajando desde Cabo Haitiano hasta Puerto Príncipe y algunos lugares intermedios, siempre con transporte local y haciendo autostop, pero también cogí un pequeño vuelo nacional.

Fue un viaje fantástico, y recomiendo visitar Haití a cualquiera que esté buscando una aventura ultra-insólita sin igual por Las Américas.

Esta actualizada y exhaustiva guía para viajar a Haití te va a mostrar todo lo que debes saber en materia de seguridad, mejores experiencias, llegar al lugar y mucho más.

Haití es un país caribeño que ocupa un tercio de La Española, una isla que comparte con la República Dominicana.

Todo el mundo conoce la República Dominicana y sus playas de ensueño, pero pocos saben cómo viajar por Haití.

Lo primero que tienes que saber es que Haití fue el primer país que fue liberado por esclavos, en 1803.

En aquella época, Haití estaba gobernado por los franceses, que se habían pasado las décadas anteriores importando cientos de esclavos de África occidental, principalmente de Malí y Benín, para trabajar en sus plantaciones de azúcar.

Lo peculiar de Haití es que, cuando consiguió su independencia, muchos de aquellos esclavos habían nacido en África, pero se convirtieron en caribeños de la noche a la mañana, y esa es la razón número uno para visitar Haití, un país puramente caribeño que aún conserva su cultura, tradiciones y esencia africana.

Cuando se viaja por Haití, de verdad sientes que estás viajando por África occidental, con todo ese caos innato que tanto atrae a los viajeros más intrépidos, pero también su arte, su música y su religión.

A todo esto súmale unas playas y paisajes caribeños de talla mundial, y el resultado es, quizás, el destino ultra-insólito más precioso y fascinante del continente americano.

No mucha gente viaja a Haití y, la mayoría de los pocos que lo hacen, suelen hacerlo en uno de esos cruceros gigantescos que navegan por el Caribe, bajando y subiendo en los principales resorts de las principales islas.

En Haití, cerca de Cabo Haitiano, hay un lugar en la zona de Labadee donde los cruceros hacen una parada. A las personas que no sean del crucero – y eso incluye también a los extranjeros – no se les permite entrar en esa burbuja turística, y a los que forman parte del crucero se les dice que todas las personas fuera de la burbuja son peligrosísimas, así que no vas a ver a ninguno por las cercanías.

Muchas veces me pregunté si aquellas personas del crucero sabían siquiera que se encontraban en un país llamado Haití.

Desde un punto de vista económico, Haití siempre ha tenido problemas, pero actualmente también está atravesando periodos bastante oscuros de violencia extrema.

Cuando visité Haití por primera vez en enero de 2023, el país ocupaba las portadas y titulares de todos los periódicos internacionales prestigiosos.

¿Qué ocurrió?

Pues bien, Haití atravesaba un episodio de auténtica anarquía desde que el presidente haitiano Jovenel Moïse fue asesinado en 2021.

Desde entonces, diversas bandas habían tomado las calles de Puerto Príncipe, la capital de Haití, con una escalada de violencia sin precedentes.

Secuestros, asesinatos y tiroteos por las calles ocurren a diario, un conflicto que ya ha provocado más de 200.000 desplazados de forma interna.

En el momento de escribir esta publicación, la situación para viajar a Haití sigue siendo prácticamente la misma, y la gravedad es tal, que muchos gobiernos ya se refieren a Haití como un estado fallido – un término bastante severo que se suele usar para países como Yemen o Libia -, al mismo tiempo que también piden la intervención extranjera.

El terremoto de 2010
En 2010, un terremoto de magnitud 7.0 hizo temblar la capital de Haití durante 35 segundos, matando a miles de personas y dejando completamente sin hogar a 1/3 de la población de Puerto Príncipe. En aquel entonces, Haití ya era uno de los países más pobres del mundo, así que te puedes hacer a la idea de lo devastador que fue este desastre para los haitianos. De hecho, dicen que el país nunca se ha llegado a recuperar del mismo y, con todos sus problemas sociales y políticos actuales, ha provocado que sea uno de los países más frágiles del planeta.

Vamos a poner el asunto en perspectiva.

He estado haciendo mochileo en solitario por Afganistán, Irak, Siria y Somalilandia, por mencionar sólo algunos países.

Es muy raro que esté preocupado cuando viajo por allí, sobre todo porque tengo un montón de contactos en esos países, y también porque tengo buena experiencia viajando por esas regiones.

Pero mi visita a Haití ya fue otra historia:

• Era la primera vez que viajaba por el Caribe
• No tenía ni un solo contacto
• Lo único que sabía de Haití era lo que veía en las noticias
• No sabía de ningún viajero que hubiera visitado Haití durante esta época anárquica

Además, las recomendaciones para viajar a Haití según la FCDO tampoco tenían muy buena pinta, ya que desaconsejaban totalmente cualquier tipo de viaje a Haití debido a la inestable situación en cuanto a seguridad.

Tenía todo en contra, pero eso me hizo sentir ciertamente emocionado, además si algo he aprendido durante mis viajes es que las cosas son muy diferentes de lo que vemos en las noticias.

Es cierto, sí que está ocurriendo esa violencia extrema, pero lo cierto es que este conflicto solo se da en Puerto Príncipe.

De hecho, se centra en determinadas zonas de Puerto Príncipe, en las zonas controladas por las distintas bandas.

Exceptuando esas zonas, se puede viajar a Haití sin problemas, sobre todo por Cabo Haitiano y los alrededores.

Cosas que hice en Cabo Haitiano:

• Autostop por la zona
• Caminar por un suburbio de camino a Labadee
• Pasear por la noche, en medio de la oscuridad

Todo lo que puedo decir es que esa parte de Haití era profundamente tranquila.

Por otro lado, Puerto Príncipe es otra historia, pero aun así puedes visitarlo, siempre que tengas los contactos adecuados y permanezcas en la zona correcta, como en Pétionville.

En Pétionville también puedes deambular y pasear solo por la noche, no hay ningún problema.

En cuanto a la parte peligrosa de Puerto Príncipe, me dirigí al centro e incluso a la Cité Soleil, el barrio marginal más grande y pobre de las Américas, y uno de los principales focos de violencia de la ciudad.

Eso sí, fui allí con un fixer local especializado en llevar a periodistas a zonas de conflicto.

Ese hombre sabía lo que hacía, además era un viejo amigo íntimo de las bandas. Aun así, ir a esa zona de Puerto Príncipe no está exento de riesgos, sobre todo debido a balas extraviadas, pero es algo que los viajeros tienen que asumir.

Importante: No voy a dar el contacto del fixer, aunque me lo pidan. Como he mencionado, esta actividad conlleva riesgos y, si empiezan a aventurarse viajeros en estas zonas, alguien acabará recibiendo un disparo y no quiero verme envuelto en algo así.

No necesitas un visado para visitar Haití, pero recibirás un sello gratuito cuando llegues al país.

Esta norma se aplica tanto en las fronteras del aeropuerto como en las terrestres.

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Se suele viajar a Haití en temporadas concretas.

La mejor temporada para viajar a Haití es de noviembre a marzo.

Esta sería la temporada seca.

En febrero, se celebra el famoso Carnaval de Jacmel, pero necesitarás algo de suerte, ya que el Carnaval se organiza de forma local, y las fechas siempre varían, pero siempre suele celebrarse entre finales de febrero y principios de marzo.

La peor temporada para visitar Haití es de agosto a octubre, que es la época de lluvias y de posibles huracanes.

Esta es una de las mejores fortalezas que he visto en mi vida, y las vistas desde el lugar son bellísimas.

Ningún otro país de América se siente tan crudo, caótico y auténtico.

Viajar por Haití no difiere mucho de los duros viajes de mochilero que podrías hacer en Malí o Benín.

Cada semana se llevan a cabo ceremonias vudú, una clara herencia de África occidental.

En Puerto Príncipe hay mucho por descubrir, y sin ninguna duda debes contemplar la escena artística del refinado barrio de Pétionville.

Haití posee el litoral más precioso de la isla, y Labadee cuenta con las orillas y aguas más limpias.

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La forma más sencilla de volar a Puerto Príncipe es desde Miami (MIA) o Fort Lauderdale (FLL), pero también desde Nueva York (JFK).

Jet Blue Airways y American Airlines ofrecen vuelos diarios a Puerto Príncipe.

Personalmente pienso que viajar a Haití desde República Dominicana es una opción mucho mejor, por 3 razones:

1. Los vuelos a Santo Domingo o Punta Cana son mucho más baratos, y además tienes innumerables conexiones con muchas ciudades de todo el mundo
2. Si no has visitado República Dominicana, podrás visitar ambos países en un solo viaje
3. Viajar por Haití es bastante duro, así que después de varios días haciendo mochileo intenso, un viaje por República Dominicana te resultará súper agradable y gratificante.

Para llegar a Haití desde República Dominicana, puedes coger uno de los autobuses diarios que conectan Santo Domingo con Puerto Príncipe o Cabo Haitiano.

La empresa que organiza estos viajes se llama Caribe Tours, y parten de esta terminal.

Te recomiendo encarecidamente que vayas a la terminal con al menos 1 día de antelación para reservar tus billetes, porque te puedes quedar sin ellos.

El autobús sale entre las 7am y las 8:30am, pero confirma la hora de salida al reservar tus billetes.

Un billete de ida cuesta unos 30-35 USD.

Además, tendrás que pagar 37 USD por las tasas de salida/frontera. Esta cantidad suele pagarse antes de subir al autobús, no al reservar tu billete.

Todo el trayecto desde Santo Domingo hasta Cabo Haitiano o Puerto Príncipe puede durar entre 8 y 12 horas. El autobús tiene Wi-Fi inestable, y te sirven una comida a base de carne que está horrible.

El cruce fronterizo es muy caótico, pero un asistente del autobús te ayudará con todas las operaciones.

Mi experiencia al entrar y salir de Haití
Cogí el autobús de Santo Domingo a Cabo Haitiano, pero a la vuelta, vine desde Puerto Príncipe de manera independiente, eso significa que, en vez de tomar un autobús directo, tomé distintos minibuses y tap-taps hasta la frontera, y crucé a pie hasta República Dominicana. Cuando llegues a República Dominicana, encontrarás transporte a varias ciudades. Es una opción más lenta, pero más aventurera, perfecta para quienes deseen explorar más allá de las ciudades principales. Si vas a Cabo Haitiano, hay que cruzar en Dajabón. Si vas a Puerto Príncipe, cruzas en Comendador.

El transporte local oficial es el tap-tap, una camioneta que recoge pasajeros, está decorada de forma muy vistosa y no se marcha hasta que se haya llenado de pasajeros, y estos pueden bajarse en cualquier punto del viaje.

Viajar por Haití en tap tap es barato a un nivel absurdo, y puedes usarlo para llegar a los lugares de interés y pueblos cercanos.

Para distancias más largas, los haitianos viajan en minibús.

Haití es un país muy pequeño, pero hay vuelos nacionales entre las principales ciudades.

La aerolínea local es Sunrise Airways.

Yo tomé un vuelo de 25 minutos desde Cabo Haitiano a Puerto Príncipe y el motivo fue que todos en Cabo Haitiano me decían que no era posible viajar allí en autobús, asegurando que el tramo de carretera cerca de Puerto Príncipe lo habían tomado las bandas.

Cuando llegué a la capital, me enteré de que no era cierto, que los autobuses simplemente estaban cogiendo una ruta diferente y más larga, así que a la vuelta ya tomé el autobús.

De todas formas, fue muy divertido tomar el vuelo con Sunrise Airways, porque usan esos aviones pequeños de 20 asientos en donde no hay puertas que separen a los pasajeros de los pilotos.

Además, el aeropuerto de Cabo Haitiano era tan pequeño que, literalmente, podías llegar al aeropuerto 15 minutos antes de la salida y aun así llegar a tiempo para coger tu vuelo.

Un billete de ida de Cabo Haitiano a Puerto Príncipe me costó 125 USD.

En Haití utilizan la gourde haitiana y, aproximadamente:

1 USD = 135 HTG

Algunos bancos sí que cambian monedas, pero yo cambiaba las mías en el hotel de Cabo Haitiano, Habitation des Lauriers.

Prefieren dólares estadounidenses, pero creo que también se pueden cambiar euros.

A diferencia de países como Siria o Irán, Haití no es un país afectado por sanciones, así que puedes retirar dinero fácilmente de ciertos cajeros automáticos e incluso pagar tu hotel con tarjeta.

Para el resto de cosas, Haití es prácticamente una economía basada en dinero en efectivo.

A decir verdad, Haití es bastante caro, mucho más que República Dominicana.

Los alojamientos de Haití no son demasiado buenos, y cuenta con que pagarás un mínimo de 50 a 70 USD por una habitación básica.

Las habitaciones son básicas, pero esos hoteles son relativamente decentes, es decir, poseen servicios, hablan inglés y están acostumbrados a tratar con extranjeros.

Sin embargo, puede ser que pagues 60 USD por una habitación muy básica sin aire acondicionado, y en la que son muy comunes los problemas con el agua y la electricidad.

He oído que algunos viajeros se alojaban en hoteles aún más baratos, en los que se alojan los lugareños haitianos, pero cuenta con que tendrán una infraestructura más básica todavía.

La comida de Haití también puede que te salga bastante cara.

Una comida en un restaurante te costará unos 10 USD, hasta 20 USD en restaurantes más elegantes.

La comida callejera del lugar es muchísimo más barata, obviamente (quizá 1 USD por comida), pero no es muy buena.

El transporte local es especialmente barato, como podrías esperar en cualquier país de este tipo.

Un viaje en tap tap es raro que te cueste más de 50 céntimos, y un minibús entre ciudades siempre te va a costar un par de USD.

Presupuesto de mochilero para Haití
Desde 85 USD al día

Haití es el país más pobre del continente americano y se encuentra entre las 25 naciones más pobres del mundo, según todas las clasificaciones.

La pobreza extrema y la falta de infraestructuras adecuadas son apreciables en cualquier rincón de Haití, incluso en zonas de Puerto Príncipe que se supone que son buenas.

Hay montones descomunales de basura ardiendo en cada esquina, no hay electricidad por la noche y hay muchísima gente que parece muy pobre y miserable.

Los viajeros extranjeros llaman mucho la atención, por lo que seguro que todos se te quedarán mirando.

Al igual que en todos los países en los que he estado, la mayoría de personas que conozcas en Haití serán amables y agradables, pero también llegué a encontrarme algunos mendigos que se pasaron de intensos y agresivos, así que tendrás que estar preparado mentalmente para lidiar con situaciones así.

No es la norma general que te estafen, pero cada cierto tiempo, puede que alguna persona trate de cobrarte de más.

Me pasó varias veces cuando cogí un tap tap, y también en bares locales. Una botella de Prestige – la cerveza haitiana – nunca te costará más de 1 USD en un bar de ese tipo, pero a menudo pagué casi 3 USD, culpa mía totalmente, por no preguntar antes el precio.

Hoy en día, Haití es un país caribeño donde la inmensa mayoría de personas son descendientes de antiguos esclavos negros africanos.

Ten en cuenta que los taínos eran los indígenas de la isla, pero Colón y su tripulación española los exterminaron en cuestión de unos años.

Algunos antiguos colonos franceses también dejaron descendencia porque tuvieron hijos con sus esclavas, lo que dio lugar a un haitiano de piel más clara llamado mulato. Actualmente, los mulatos forman la mayor parte de la élite, la clase política y económica de Haití.

Los pocos haitianos que quedan son generalmente de ascendencia árabe, de Líbano y Siria, y es posible que los veas frecuentando las zonas más ricas de Puerto Príncipe.

Haití es un país muy religioso y, tal es la influencia de sus antepasados de África occidental, que el vudú está reconocido como la religión oficial del estado, junto con el catolicismo.

Las iglesias siempre están abarrotadas los domingos, pero el vudú haitiano también desempeña una importante función y asistir a una ceremonia es uno de los momentos más destacados al hacer mochileo por Haití, pero necesitarás algo de suerte.

Desafortunadamente, no pude asistir a ninguna, pero sí visité un templo vudú, un taller donde vendían artefactos relacionados con el vudú y también un mercado.

El vudú haitiano se basa en espíritus conocidos como Iwa, y aquí descubrirás más sobre este tema.

Estas 2 obras de arte vudú se encuentran en Atis Rezistans, un taller que crea arte utilizando basura. Este lugar fue uno de los mejores lugares que presencié durante mi viaje a Haití.

Creo que los haitianos son las personas más tímidas ante las cámaras que he conocido en mis viajes.

Son tan tímidos que hasta puede que te griten por hacer una foto a la propia calle, sin apuntar tu cámara a ningún rostro en particular.

Simplemente no les gusta, y cuando estés paseando por los mercados, por ejemplo, siempre pide permiso, aunque créeme, es muy raro que te lo den, a no ser que hayas interactuado con ellos antes de pedírselo.

Tanto el creole como el francés son las lenguas oficiales de Haití.

El francés es el idioma utilizado por la Administración y la élite de Haití.

El resto de personas hablan el creole, y es una peculiar mezcla de francés, español, inglés e incluso taíno, según dicen.

No obstante, las personas de habla francesa no entienden el creole y, normalmente, las personas con menos estudios tampoco hablan francés.

El inglés también se habla poco por las calles.

Nunca seré fan de la comida caribeña.

Me parece insípida y aburrida, pero se puede comer.

Por lo general, todos los restaurantes sirven una ración de proteína acompañada de plátano frito y arroz mezclado con alubias negras.

La proteína puede consistir en cualquier cosa, desde pescado a la parrilla (pwason poukannen) hasta cerdo (griot), pollo e incluso langosta, si vas al lugar adecuado.

Quitando uno o dos días, consumí todas las combinaciones anteriores en todas y cada una de las comidas.

La cerveza nacional se llama Prestige. La venden por todas partes y los haitianos la pueden beber a cualquier hora del día.

Los haitianos también se enorgullecen de su ron de producción local, siendo Barbancourt la mejor marca.

En general, el Wi-Fi es horroroso en todo Haití, por lo que te recomiendo que te hagas con una tarjeta SIM, que funciona relativamente bien.

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