Qué ver en Bakú – Itinerario de 3 días

Por Joan Torres 24 Comentarios Actualizado a mayo 8, 2024

Hasta hace 4 días, Bakú, la capital de Azerbaiyán, era una ciudad de lo más insólita conocida únicamente por los viajeros más intrépidos.

Pierce Brosnan, en su película de James Bond El mundo nunca es suficiente, fue la primera persona que finalmente nos habló de su existencia al mostrarnos las imágenes de unos yacimientos petrolíferos situados en las llanuras desérticas de las afueras de la capital de Bakú.

Dichas imágenes, sin embargo, no acabaron de ayudar a despertar el interés por el país, y es que la gente se imaginaba que Bakú no era muy diferente de las monarquías árabes del Golfo, lo cual no podía estar más alejado de la realidad.

Si bien es verdad que Bakú es una ciudad rica en petróleo y que de hecho, fue el principal exportador de petróleo del mundo a principios del siglo XX, mucho antes de que las monarquías del Golfo descubriesen el oro negro, por otra parte, es también una ciudad con muchísima historia y que pertenece a una región que ha sido habitada durante miles de años y que además, ha tenido un papel importante en la Ruta de la Seda, sin contar por supuesto, en que formó parte de la Unión Soviética durante casi un siglo.

No obstante, Bakú es, a día de hoy, una capital casi futurística que ha conseguido combinar tradición con la más alta modernidad, dos elementos que pueden distinguirse por toda la ciudad.

Después de visitarla en dos ocasiones, en 2016 y 2018, aquí tenéis una guía completa sobre todo lo que hay qué ver en Bakú dentro de un itinerario de 3 días.

Para saber más sobre el país, lee mi itinerario de 2 semanas por Azerbaijan

Desde finales del siglo XIX, la ciudad de Bakú ha sido un referente mundial de la exportación de petróleo y desde entonces, ha ido creciendo a un ritmo insuperable, pero fue desde la disolución de la URSS y de su seguida independencia, que el desarrollo de Bakú se disparó, convirtiéndose en una ciudad futurística y moderna equiparable a los estándares europeos.

Sin embargo, debido a la aparente corrupción, o mejor dicho, al mal provecho que le han sacado a los recursos, dicho desarrollo del país se ha centrado única y exclusivamente en la capital Bakú, hasta tal punto que su contraste con la segunda ciudad de Azerbaiyán, Ganja, en donde todavía encuentras calles sin asfaltar en pleno centro, es descomunal.

La capital de Azerbaiyán es una ciudad lujosa, una especie de Dubai pero con alma, y es que en el centro de la ciudad encontrarás un concesionario de Rolls Royce y las tiendas de las marcas más lujosas, todo acompañado de un bellísimo casco antiguo con edificios pertenecientes al siglo XII.

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Bakú es, sin lugar a duda, la ciudad más desarrollada de todo el Cáucaso (incluyendo Armenia y Georgia), aunque en mi humilde opinión, considero que se trata de un desarrollo económico y no social, a diferencia de la capital de Georgia, cuyos jóvenes están ya aprendiendo los valores europeos.

A pesar de ser una ciudad rica y supuestamente secular, en Bakú se puede todavía apreciar que la gente es mucho más tradicional, y es que en la mayoría de lugares se ven únicamente hombres, se habla menos inglés, y por lo general, la gente no es tan abierta.

No obstante, viajar a Bakú vale muchísimo la pena y no únicamente por su estrambótica composición, sino porque todo su conjunto es una mezcla de Europa, Oriente y Unión Soviética tan y tan caótica, que resulta prácticamente imposible definirla, y este es su factor más apasionante.

Para toda la información práctica del país, lee todo lo que hay qué saber para viajar a Azerbaiyán

Desde enero del 2016, se puede solicitar un visado online a través del portal oficial.

El visado cuesta 23USD, tarda 3 días laborables y es válido para 30 días.

Por 50USD, también se puede solicitar visado urgente y obtenerlo en el mismo día.

España, México, Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, Paraguay, Panamá, Cuba y Costa Rica son los países hispano-hablantes que pueden solicitarlo online. El resto deberéis de hacerlo vía embajada. Aquí podéis ver la lista actualizada de países.

Si vas a Georgia, aquí puedes leer todos los consejos para visitar Georgia

Taxi – Para evitar negociar con los taxistas, te recomiendo que Uber. Es súper barato y para viajecitos cortos por la ciudad, te cobrarán unos 2-3AZN (entre 1€ y 1,50€).

Metro – Existen dos líneas de metro y un billete sencillo cuesta 0,30AZN (15 céntimos). Primero, tendrás que conseguir una tarjeta de metro que cuesta 2AZN (1€), aunque puedes comprar una de temporal (que se puede recargar una sola vez) y que cuesta 0,20AZN (10 céntimos).

Autobús – Para donde no llegue el metro, también hay una red de autobuses modernos, aunque deberás de saber bien a dónde vas. El precio es el mismo que con el metro.

En autobús – Hay buses que van y vienen del aeropuerto cada 20 o 30 minutos. Te deja en pleno centro, delante de la estación de metro 28th May. El billete cuesta 1.30AZN (65 céntimos) y también funciona con la misma tarjeta que con el metro.

En taxi – Con Uber, el taxi cuesta unos 10AZN (5€).

3 días es más que tiempo suficiente para visitar Bakú, incluyendo un viaje de un día para ir a ver los volcanos y petroglifos de Qobustán.

El itinerario del primer día es muy optimista, pero con buena planificación, yo creo que lo puedes ver todo.

Considerado como Patrimonio de la UNESCO, las murallas del casco viejo de Bakú definen hasta donde solía extenderse la ciudad y, en su día, dichos muros llegaron a albergar hasta 7,000 personas.

Su edificio más antiguo se dice que pertenece al siglo XI, aunque algunos historiadores rumorean que podrían pertenecer al siglo VII.

Como en todo casco antiguo, lo mejor que puedes hacer es pederte por sus calles laberínticas, aunque sí que hay algunos edificios que son de visita obligatoria, como la Torre Maiden, uno de los edificios icónicos de Azerbaiyán y que hasta aparece impreso en uno de sus billetes. La torre contiene un museo que muestra la evolución histórica de Bakú. También se puede subir arriba para disfrutar de una de los mejores vistas de la ciudad, aunque te clavan 10AZN (5€).

El otro edificio que no te puedes perder es el Palacio de los Shirvanshas y cuya principal atracción es una impresionante mezquita del siglo XV. Los Shirvanshas son la dinastía que gobernó la región durante casi 700 años, desde el siglo IX hasta el XVI.

Sin lugar a duda, el casco antiguo es lo mejor qué ver en Bakú. 

Si quieres visitar el casco antiguo de Bakú con un guía experto, te aconsejo que lo reserves a través de Civitatis, ya que se puede reservar con un simple click y siempre cuentan con profesionales. PINCHA AQUÍ PARA SABER MÁS

En mi opinión, el museo de las alfombras es uno de aquellos museos que lo que mola es no entrar, y es que de fuera mola más que por dentro.

Fuera bromas.

Si estás interesado en ver todo tipo de alfombras, entonces adelante, pero sino, lo guapo es sacarle fotos a sus muros ondulantes cuyo fin es el de imitar una alfombra.

Civitatis también ofrece un tour de museos que incluye el Museo de las Alfombras. PINCHA AQUÍ PARA SABER MÁS

Las Flame Towers son los tres rascacielos en forma de llama que, por sí solas, han conseguido relacionar Bakú con el concepto de futurismo.

La verdad es que únicamente miden 182m, pero debido a su posición, en la parte alta de Bakú, se pueden ver desde todas partes.

Se puede llegar andando por unas escaleras que transcurren por un parque bien bonito. En la parte de abajo del parque, hay un funicular, pero siempre que pasé por delante estaba cerrado.

Este lugar está fuera de la ruta turística clásica, pero si estás interesado en ver de muy cerca extractores de petróleo en pleno funcionamiento, pues esta es una buena oportunidad.

No están muy lejos, y de hecho se puede llegar andando desde las Flame Towers. Están justo detrás de la torre de televisión (puedes ver la localización exacta en el mapa) y además, desde allí se pueden observar asombrosas vistas de la ciudad y la bahía.

Por cierto, si bajas por el lado del mar, pasarás por un barrio de Bakú muy pobre y que genera un gran contraste con la parte rica de la ciudad, que está a no más de 15 minutos caminando.

Una mezquita de un siglo de antigüedad aproximadamente, aunque el lugar donde se construyó había servido como santuario desde el siglo XV.

Sinceramente, no es nada del otro mundo, pero para mí, lo interesante fue ver la otra cara de Azerbaiyán, que es la de ver a locales rezando y mostrando su fe en el islam.

Como en todos los demás países musulmanes ex-soviéticos, el gobierno de Azerbaiyán es secular y su gran peculiaridad es que, a diferencia del resto del mundo, los más religiosos son la gente joven y no los mayores que vivieron durante la época soviética, más que nada porque parece que el islam se está poniendo de moda. También observé algo parecido cuando viajaba por Uzbekistán.

Otra de las cosas geniales qué hacer en Bakú es visitar un edificio futurista cuyo arquitecto es la ya difunta mujer británica iraquí llamada Zaha Hadid.

Con sus ondulaciones asimétricas casi imposibles, el edificio es una muestra perfecta de innovación y arte moderno.

Sus alrededores están también rodeados de estatuas ultra-raras, tipo conejos y caracoles, a parte del ya clásico I Love Baku.

El centro alberga distintas exposiciones temporales de todo tipo. La entrada cuesta 15AZN (7,50€).

Si te da tiempo y te dan ganas, también puedes visitar el museo que posee el récord Guinness de la mayor colección de libros en miniatura del mundo, incluyendo los 3 libros más pequeños que existen, de 2mm x 2mm y que únicamente se pueden ver en un microscopio.

La verdad es que dichos libros no tienen mucho sentido, más que nada porque no se pueden leer, pero su origen proviene de una antigua tradición persa y además, tiene su gracia.

Compuesto de todas las tiendas de moda, así como restaurantes, bares, cafeterías hipsters, parques y demás, te recomiendo que vayas al centro al final del día, concretamente alrededor de Fountain Square, que es donde se reúnen todos los bakuenses a pasar el rato, ya sea a comer o a tomarse unas cervezas.

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Este mercado me lo encontré de casualidad y después descubrí que es muy famoso entre los locales, si bien no vi a ningún turista.

Yasil es un mercado tradicional que ha sido reformado de acuerdo a los estándares modernos de Bakú. Es el típico mercado de fruta, verduras y demás alimentos, y todo lo que venden es de temporada.

Yo personalmente tuve la suerte de visitarlo en octubre, que es la temporada de granadas, uno de los emblemas e iconos de Azerbaiyán.

Casi todas las tiendas estaban a rebosar de dicha fruta y, por supuesto, te podías también tomar un zumo recién exprimido por tan sólo 1AZN (50 céntimos).

Sabías que a Azerbaiyán la suelen llamar the Land of Fire (Tierra del Fuego)?

Pues si sigues el fútbol español, deberías saber que este era el emblema que llevaba el Atlético de Madrid en su camiseta.

Desde el siglo XII, muchos viajeros que deambulaban por la zona narraban sobre la existencia de varios fuegos mágicos repartidos por toda la región.

Creían que eran mágicos porque dichos fuegos ardían sin la necesidad de usar leña, pero lo que no sabían es que el fuego provenía de unas cavidades llenas de gas.

Yanar Dag es uno de estos lugares en los que todavía se puede apreciar dicha llama, aunque hay que decir que la llama es a día de hoy artificial, y es que ésta se apagó en el siglo XIX cuando descubrieron un yacimiento de petróleo cerca.

Cómo llegar – Yanar Dag está a las afueras de la ciudad. Para llegar, tendrás que coger el autobús 147 desde la estación de metro Azadliq. De lo contrario, puedes también llegar en Uber, más fácil, rápido y tampoco te resultará tan caro.

En el siglo XVII, un viajero mercante quedó tan fascinado con una de estas llamas que decidió construir un templo a su alrededor.

Cómo llegar – El templo está muy cerca del aeropuerto y el autobús que pasa cerca es el 184.

Por cierto, si prefieres ir en un tour organizado, más que nada para tener a alguien que te vaya contando los detalles, los de Civitatis ofrecen un tour completo incluye Yanar Dag + Templo Fuego.

Durante le Edad de Piedra, unos 15,000 años atrás aproximadamente, durante la época en la que la costa del Mar Caspio era completamente fértil y verde, un grupo de recolectores y cazadores se asentaron por las cuevas de los alrededores.

Estas cuevas fueron decoradas con arte de la época, con más de 600 petroglifos para ser exactos y que a día de hoy, se conservan todavía en perfectas condiciones.

Para más información, lee mi artículo sobre los petroglifos de Qobustán (incluye precios y cómo llegar).

Por si te interesa, también se pueden visitar una especie de volcanes que escupen barro y que son toda una atracción. Están cerca de los petroglifos y la única manera de llegar es en coche.

Si quieres hacer las cosas fácil e ir con un guía, de nuevo te aconsejo que reserves un tour con los de Civitatis, que incluye una visita a los petroglifos + los volcanes de barro + una mezquita muy antigua que se encuentra por la zona.

He aquí mis recomendaciones (todos los lugares son frecuentados por locales).

Económico – Xezer – Restaurante que sirve comida tradicional, muy barato.

Comida rápida gourmet – Gourmet Pendir & Chorek – La primera cadena de comida rápida en Azerbaiyán sirve comida local del tipo sandwiches y demás, pero en plan gourmet.

Elegante – Sumakh – Un restaurante bastante pijo que sirve cocina tradicional de alta calidad.

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